¿Entender o sentir?
- Paula Lopez Moreno
- 18 oct 2017
- 3 Min. de lectura

Visitar una exposición de cuadros es siempre una experiencia agradable. Por un momento, nos olvidamos de lo que sucede afuera –y en nuestras vidas– y simplemente nos entregamos al deleite de observar.
Pero, ¿no te ha sucedido que ante ciertos cuadros –normalmente de arte abstracto– te encuentras a ti mismo preguntándote qué es? No te preocupes, le pasa a casi todo el mundo. Es normal que tu inconsciente intente descifrar esas imágenes, buscándoles similitud con algo familiar. Los neurocientíficos[1] explican que eso se debe a que nuestro cerebro interpreta las imágenes de los cuadros de la misma forma que interpreta las demás imágenes del mundo. Es por eso que, ante los cuadros abstractos, uno comienza (automáticamente) a comparar lo que ve con lo que conoce, para satisfacer esa nuestra necesidad de reconocer lo que estamos mirando.
¿Te has imaginado alguna vez cómo sería habitar un cuadro? No hablo de cuadros realistas, en los que todos los objetos son perfectamente reconocibles; no hablo de meterte en “Las Meninas” de Velázquez y ponerte a jugar con el perrito de la infanta Margarita, no. Hablo de meterte dentro de un cuadro abstracto, uno de esos en los que ninguna de las imágenes puede identificarse a primera –o segunda– vista; de entrar en uno de ellos y pasear por ese universo creado por un artista. ¿Será posible hacerlo?
Muchos artistas que se expresan a través del arte abstracto (me animaría a afirmar que prácticamente todos) se han enfrentado a la ya mencionada pregunta: “¿qué es?”. Paula López Moreno, artista y gestora cultural boliviana, comenta que una vez se vio en la necesidad de explicar, a una niña de seis años, lo que era un cuadro abstracto –el cuadro que en ese momento estaba pintando– y que la respuesta que dio en se momento se ha convertido en la mejor forma de explicar su obra: “Es el dibujo –o la pintura– de algo imaginario, que no existía pero que ahora existe, porque yo lo creé.”
Si te interesa leer sobre el proceso creativo de esta serie de cuadros, pincha aquí.
Justamente con la intención de disuadir a su público a escapar de las comparaciones con el mundo conocido y de despertar en los visitantes la sensación de estar mirando los paisajes de un mundo desconocido, López Moreno ha creado unos videos que promocionan (en las redes) y acompañarán (en sala) su exposición Cuadros en Blanco.
Para ver los videos de Cuadros en Blanco pincha aquí.
“Creé los videos con la intención de estimular la imaginación de mi público y de invitarlos a vivir mis cuadros desde una perspectiva diferente. Quiero que el público habite ese universo figurativo que compone mi obra; que pasee la vista por los lienzos sin necesidad de hacer comparaciones con imágenes conocidas” –ha declarado la artista y gestora cultural.
Cuadros en Blanco es una colección de 36 obras en distintos formatos –el cuadro más pequeño mide 9 x 14 centímetros y el más grande 1,80 x 1,30 metros–. “Son como ventanas de diferentes tamaños a ese otro mundo que he creado a través de mi obra”– ha dicho la pintora–.

Además, al visitar la muestra podrás también ayudar a la artista en el proceso creativo, ya que la artista dejará al alcance de los visitantes una serie de libros donde el público podrá sugerir el título para cada uno de los cuadros. Así es, ninguno de los cuadros expuestos tiene título. ¿Te animarías a ponérselos?
Para visitar la galería virtual
de esta exposición pincha aquí
No obstante, para vivir en persona la experiencia de pasear por estos cuadros te recomiendo visitar el Centro de la Cultura Plurinacional a partir del próximo miércoles 20 de diciembre.
Los horarios de atención son: (por las mañánas) de 8:00 a 12:00 y (por la tarde) de 4:00 a 8:00 de la noche.
Ve con tus amigos o con tu familia y diviértanse juntos,
poniendo título a los cuadros y leyendo los títulos que pusieron otras personas.
La exposición estará abierta al público desde el 20 de diciembre próximo, en el Salón Chiquitano del Centro de la Cultura Plurinacional de Santa Cruz (calle René Moreno Nº 369).
Comments